supervices
Todas hemos sido niñas y hemos querido llevar tacones. Existe una tendencia que podemos llamar natural de que las niñas quieran aparentar más edad, esto podría entenderse dentro de un contexto de normalidad.
Pero, ¿qué pasa si empezamos a ver a niñas menores de 10 años llevando tacones? ¿A qué edad podríamos recomendar empezar a usarlos? De estas y otras cuestiones vamos a hablar. Pero como siempre decimos, son las madres las que tienen la última palabra.
Consecuencias del uso de zapatos de tacón alto
No vamos a discutir que llevar tacones hace que las mujeres parezcan más delgadas, pues caminan de forma diferente. Los efectos secundarios, positivos y negativos, son evidentes, pero ¿a qué edad deben las niñas empezar a llevar tacones? ¿Cuáles son las consecuencias de llevar tacones?
Con los tacones, incluso de 2 centímetros de altura, los músculos de las piernas están en un nivel de contracción mayor. Aunque la niña no se ponga totalmente de puntillas, sus músculos no se relajan tanto como si llevara zapatos planos cuando da un paso adelante. Por lo tanto, los tendones se acostumbran a un pie que no está en plena extensión, al estar acortados.
Además, la postura de la columna vertebral tiende a cambiar, lo que, a largo plazo, puede causar dolor con el tiempo. Los tacones empujan el cuerpo hacia delante y, para mantener el equilibrio, la espalda debe arquearse de forma natural para corregir la posición, por lo que la columna vertebral se modifica.
Además, el peso del cuerpo no se distribuye de forma natural sobre el pie, sino que recae sobre el metatarso y los dedos, que no están preparados para ello.
Estas son las consecuencias físicas, pero también queremos señalar que hay otras consecuencias psicológicas en las que hay una “adultización” de las niñas.
Tacones altos para adolescentes
Con estos datos, llegamos a la adolescencia, donde los diseñadores y la propia moda han incorporado los tacones para las chicas jóvenes. Además, a estas edades, las niñas ya tienen el mismo tamaño de pie que un adulto y pueden, en teoría, utilizar cualquier modelo.
La Organización Mundial de la Salud habla de que las sandalias de tacón bajo podrían usarse a partir de los 12 años. Lo que no nos convence es por qué, según dicen para que a los 15 años, sus piernas ya sean estables, y no sufra al bailar el vals en su fiesta. Y sí, la cultura también juega un papel importante en el uso temprano de los tacones.
En los diseños de tacones que se utilizan para las adolescentes, éstos suelen ser más anchos y cómodos, muchos de ellos en forma de cuña, en un material ligero y flexible, como el corcho o la yuca. Otra opción que vemos en la moda son las plataformas altas.
¿Son los zapatos de baile lo mismo que los tacones altos?
Hace un par de años se hizo viral la foto de la hija de Katie Holmes y Tom Cruise, cuando apareció con tacones a los 3 años. Muchos pusieron el grito en el cielo y otros lo vieron normal. Eran unos zapatos de baile de tacón alto, y la niña, con el permiso de sus padres, los lleva habitualmente. Sin entrar en la polémica de los tacones, son para eso si son para bailar.
Esta anécdota se puede trasladar a nuestro país, donde algunos trajes regionales llevan tacones altos como complemento. Y hay zapatos de niña con tacones. Lo ideal es no utilizar nunca estos zapatos, porque pueden provocar lesiones durante el desarrollo psicomotor y físico de las niñas, sobre todo si tienen 3 años, pero podemos dejar que los lleven en los bailes o en periodos muy concretos y cortos de tiempo.
Recuerda que la mayor parte del tiempo, por no decir todo, las niñas, al igual que los niños, deben llevar un calzado ligero y flexible que les permita mover los pies con naturalidad y caminar con seguridad, evitando resbalones y caídas.